Tres modelos de puntos cuánticos ofrecen miles de millones de colores y tasas de actualización de milisegundos.
Los lanzamientos de dispositivos para gaming más mucho más allá de ordenadores potentes y con una estética distinta, los teclados o los ratones. Los monitores también tienen su área especializada y desde Samsung nos llega ahora su última apuesta en este campo: monitores curvos QLED con HDR para gaming.
El año pasado ya vimos que la curva parece una condición sine qua non para los coreanos cuando hablamos de una pantalla para el juego, con el CH711 que incorporaba la tecnología propia Quantum Dot. En esta ocasión se trata de los nuevos CHG90 y CHG70, manteniendo la apuesta por los tamaños de 27 y 31,5 pulgadas (CHG70) e incorporando las 49 pulgadas (CHG90), además de sumar el HDR a su tecnología QLED (un Quantum Dot rebautizado y actualizado).
Sin llegar al 4K, pero la curva que no falte
Lo que llama la atención a primera vista es el aspect ratio de 32:9 sobre todo en el monitor de 49 pulgadas, dado que como decíamos la curva ya es una vieja conocida no sólo en los monitores de Samsung en lo que se refiere a dispositivos para gamers. De hecho, esta sigue siendo 1.800R (es decir, con un radio de curvatura de 1.800 milímetros) y tiene un ángulo de visión de 178 grados.
La resolución es superior a los anteriores, saltando del WQHD (2.560 x 1.440 píxeles) al DFHD o doble FullHD, 3.840 x 1.080 píxeles. Pero lo que destaca es el HDR, lo cual es más habitual en televisores, aunque ya lo vimos por primera vez con ASUS en su ROG Swift PG27UQ o posteriormente con el Predator x27 de Acer de Acer, ambos 4K.
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