En momentos de euforia, nadie desea que le arruinen la fiesta. Mucho menos ver la realidad. En general, de los acontecimientos que a diario nos rodean, nos basta con darles más importancia a aquéllos que nos favorecen y subestimar los que nos son adversos.
Esto es un poco lo que está pasando en Wall Street en estos días, pero vamos por partes.
Las 3 noticias del fin de semana
1.- Un ciber ataque mundial sin precedentes ha afectado desde el viernes pasado a más de 200.000 computadoras en 150 países dejando a fábricas, hospitales y escuelas sin funcionar. Pero lo más grave, como sucede en estos casos, es que desnuda la vulnerabilidad de los sistemas informáticos en general y abre la puerta a la posibilidad de nuevos ataques.
2.- Corea del Norte ha probado con éxito el lanzamiento de un misil que sería capaz de llevar cargas nucleares e incluso impactar contra bases de EEUU en el Pacífico. Con motivo de ello, la comunidad internacional se encuentra en alerta y tanto EEUU como Japón han solicitado una reunión de urgencia al Consejo de Seguridad de la ONU.
3.- Rusia y Arabia Saudita manifestaron su voluntad de extender los recortes en la producción de crudo hasta marzo de 2018.
¿Cómo reaccionó la bolsa ?
Hoy los principales índices bursátiles de EEUU tuvieron comenzaron la semana con una fuerte tendencia alcista. Tanto el S&P 500 (+0,48%) como el Nasdaq Composite (+0,46%) han marcado este lunes nuevos máximos de todos los tiempos. El Dow Jones, sin marcar nuevos máximos también siguió el mismo rumbo (+0,41%).
Las fuertes subas de ayer estuvieron motorizadas fundamentalmente por dos sectores: la energía y la tecnología. El precio del crudo, por su parte, también tuvo una recuperación.
Es cierto que un acuerdo entre dos de los principales productores de petróleo para limitar su producción es una buena noticia para el precio internacional de este commodity y es razonable que las acciones ligadas a la energía se vean beneficiadas como consecuencia de ello.
Sin embargo, lo que resulta más impactante es la reacción de la bolsa respecto de noticias que debieran generar incertidumbre y volatilidad como el ciber ataque y la tensión con Corea del Norte.
Muy por el contrario ello no sucedió, y lo más llamativo fue que el otro gran sector que ha estado fuerte al alza ayer fue la tecnología. No sólo las compañías dedicadas al software de protección tuvieron grandes subas, sino que fue un buen día para todas las tecnológicas en general.
El VIX, indice que mide la volatilidad esperada viene cotizando muy bajo (ha cerrado la semana pasada a 10,40 pero llegó a tocar un piso de 9,77). Esto implica justamente que las expectativas de volatilidad se encuentran muy bajas. ¿Y por qué esto sería una mala noticia? El razonamiento detrás es el de «la calma que antecede al huracán», y la señal que podría dar el índice es de estar en un piso y ser la antesala de un fuerte rebote en la volatilidad.
Además, este índice ha demostrado tener una correlación negativa con la bolsa de EEUU. Es decir cuando sube uno baja el otro y viceversa. Por lo tanto, si se dispara (las expectativas de volatilidad aumentan) esto debiera afectar negativamente el desempeño de los principales índices de Wall Street.
Para tener una idea, tengamos en cuenta que la última vez que estuvo en niveles tan bajos el VIX fue en el año 2006, antes de que comenzara a desatarse la crisis subprime en EEUU.
¿Qué es lo que está pasando?
En nuestra opinión, todos estos son síntomas de que el mercado de acciones se encuentra en un momento de euforia generalizada con subas de precios que cada vez parecen tener menos sentido (por lo menos para la teoría económica clásica).
Además, tengamos en cuenta que los precios actuales implican valuaciones para las firmas muy por encima de lo que sería un valor razonable si atendemos a lo que efectivamente muestran sus balances.
Para tener una idea más gráfica, veamos el caso de Apple.
En lo que va del año, las acciones de la compañía subieron de USD 115,8 a USD 155,7, lo que implica una suba de más del 34%.
La capitalización bursátil del gigante tecnológico aumentó en este período más de USD 200.000 millones de dólares. Sin embargo, las ganancias netas de la firma en 2016 cayeron un -14,43% respecto de 2015, y en lo que va de este año no ha sucedido nada fuera de lo común que haga suponer ganancias extraordinarias.
Para tener una idea de la magnitud de la irracionalidad de esta suba, pensemos que compañías como Chevron, AB Inbev (el gigante cervecero, dueño entre muchas otras de Budweirser y Corona) o Coca Cola, tienen un market cap cercano a los USD 200 billions (en valores actuales). Es decir, que el mercado está suponiendo que Apple agregó en estos meses el valor equivalente a incorporar a una de estas firmas.
Está más que claro que este escenario no es sostenible por mucho más tiempo. Lo que permanece como una incógnita de momento es hasta cuándo gobernará la irracionalidad en Wall Street.
Después de todo, como decía la cita de John M. Keynes, que el domingo Chris MacIntosh recordaba en su columna de Global Macro Value: «los mercados pueden permanecer irracionales más tiempo del que tú puedes permanecer solvente.»
Se vienen muy buenas oportunidades para operar algunos títulos de la bolsa de EEUU, tanto si el mercado continúa con su tendencia actual, pero especialmente cuando se produzca finalmente un ajuste en los precios.